Este pasado 17 y 18 de Octubre del año en curso se suscito su 42° Festival Artístico del Pueblo
Purépecha.
El Comité Organizador del Concurso informó que cientos de purépechas que a lo largo del año trabajan en los más variados gremios, guardan dos días
de octubre para presentarse en Zacán, en el corazón de la Meseta Purépecha,
para concursar como danzantes, músicos o intérpretes de las piezas más
arraigadas en la identidad de la etnia.
Con esmero elaboran durante varios meses sus atuendos y ensayan al
término de sus jornadas laborales, para presentarse ante una multitudinaria
audiencia que fácilmente supera los tres mil asistentes, en dos días
ininterrumpidos con sus noches y una fiesta de ritmo y color denominada
Festival Artístico del Pueblo P’urhépecha .
Compiten en concursos de pirekuas (música purépecha reconocida como
Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO), danzas, presentación de
orquestas y pireris (cantautores purépecha).
Como en años anteriores, a la par del Festival, Zacán ofrece otros
atractivos tales como:
- XII Feria del atole p’urhépecha, el 17 y 18 de octubre a partir de las 17:00 hrs. en el Auditorio Cultural.
- Torneo tradicional de uarhukua (pelota encendida), que se realizará el 18 de octubre a las 11:00 a.m.
- Exposición, venta y concurso de artesanías, el 18 de octubre en el edificio de la Huatápera.
- Fiesta de San Lucas, uno de los Santos Patronos del pueblo.
- Templo de San Pedro
En gran parte de la Meseta Purépecha existe una profunda devoción a
los Santos Santiago y Lucas. Este último se reconoce porque se le representa en
compañía de un toro.
Zacán es un pueblo de la meseta purépecha que aún conserva la tradicional
arquitectura tarasca, empleada desde hace siglos, la cual se deben las
pintorescas trojes donde habita la gente de toda la meseta y en la que se
siguen oyendo los dulces sonidos de su lengua autóctona.
Pero lo que hoy nos lleva a Zacán es el tradicional Concurso de la
Raza Purépecha, que en octubre de 1999 celebra sus 28 años de vida. Este evento
consiste en un concurso al cual mandan delegaciones todos los pueblos de dicha
meseta, que se divide en cuatro regiones: la lacustre, la sierra, la cañada de
los Once Pueblos y la región de Tarécuato.
Estas delegaciones participan en
cuatro diferentes categorías: danzas, bandas, orquestas y pirekuas. La música
es uno de los puntos donde el sincretismo que resultó del encuentro de esas dos
culturas ajenas hace quinientos años, ha producido grandes resultados; prueba
de ello son estas cuatro categorías que se identifican netamente como parte de
la música purépecha y que sólo dos de ellas tienen reminiscencias
prehispánicas, como las pirekuas y las danzas.
Hablando de estas dos categorías, podemos considerar, como consentidos
del público asistente, al grupo local que orgullosamente lleva por nombre
"Dueto Zacán", y en la danza, a la de los Kúrpites, que por sus
elaborados y vistosos trajes pareciera que no son de la región; esta danza se
caracteriza porque los ejecutantes son exclusivamente jóvenes casaderos cuyos
trajes han sido confeccionados por sus novias. Otra danza es la de los
Chilinchilies, la cual cuenta con los patrones musicales, la representación de
la cosmovisión y la creación del hombre purépecha, y que debe su nombre al
sonido que emiten las sonajas al ser tocadas hacia los cuatro puntos
cardinales. Esta danza ha sido rescatada gracias a la tradición oral tan
arraigada en el pueblo purépecha, ya que antes no existía literatura ni
escritura que resguardara su vasta cultura.
Es obvio que las bandas y orquestas integraron todos los instrumentos
europeos de la típica orquesta de cámara, y que por esta razón no hubo rescate
de los instrumentos prehispánicos como la quiringua, la ocarina o los huesos.
Sin embargo, las orquestas y bandas formadas a partir de dichos instrumentos
arraigaron su propia música, que ya es toda una tradición en abajeños y sones.
Por esta razón las bandas son obligadas a participar con una obertura y una
marcha además de los sones y abajeños que interpreten. Entre las bandas
resultará ganadora aquella que logre hacer gritar y bailar de alegría,
contagiando al auditorio de ese ambiente y de ese sentir purépecha.
La fiesta dura una semana, pero lo bueno comienza el día 17 con
exposiciones y venta de bordados que elaboran las mujeres del pueblo, los
cuales aparte de tener diferentes figuras, nunca rompen con los esquemas
tradicionales del bordado, logrando un estilizado y perfecto punto de cruz;
estas exposiciones, que también culminan en un concurso de bordados y otras
artesanías, se llevan a cabo a partir de 1985 en la Guatápera, construida en el
siglo XVII por los frailes franciscanos.
Ese mismo día por la tarde comenzará la eliminatoria del concurso, y
el día 18 por la tarde, a partir de las 6 o 7 de la noche, se inicia el
concurso, que a veces se prolonga hasta la madrugada, y en el cual la banda
ganadora de esa noche regalará al público una hora de sones abajeños para
entrar en calor con los famosos en cuentros-grupos de varias personas agarradas
del brazo encontrándose y/o toreándose con otros.
El día 19 por la mañana saldrá a las calles el tradicional toro de
once. Este toro sale de la casa del mayordomo del pueblo, donde se adorna y se
le dan los toques necesarios para ir vistosamente a su encuentro con la gente
que lo espera con júbilo por las calles de Zacán, tapizadas de finísima arena a
consecuencia de la erupción del volcán Paricutín. A este famoso paseo se le
conoce como toro de once, porque el toro sale, anunciado por las campanas de la
iglesia, justo a las 11 a.m. Durante su trayecto le amenizará una banda con sus
alegres notas, la cual siempre va detrás de la gente y del toro musicalizando
sones de la región. También durante este recorrido se podrán observar los
vistosos trajes de la mujer purépecha, ya que las primas y sobrinas del
carguero o mayordomo recorren el trayecto antes mencionado vestido de guares o guarecitas.
El toro de once tiene tanta representatividad en toda la región
gracias a que el templo de Zacán, construido en 1560, aloja en uno de sus
retablos a San Lucas, patrono de los ganaderos, que en esta fecha es visitado y
ataviado con un gran número de milagros por la gente que visita Zacán, además
de que el paseo es toda una representación ritual del trabajo del animal y del
agradecimiento de los ganaderos.
Y qué decir del arte culinario purépecha; durante los días 18 y 19 es
muy común que uno pueda deleitarse con un delicioso churipo-caldo de res con
col acompañado de unas ricas corundas que, como la tradición dice, si cuando
uno la desenvuelve ésta mantiene una forma de estrella de cinco picos, la joven
que las ha elaborado está lista para el matrimonio. Zacán cuenta con tres o
cuatro fiestas principales, pero la del 18 de octubre es la más importante para
todo el pueblo, donde se vive al cien por ciento todo lo que encierra la
palabra fiesta, ya que, a diferencia de las de otros pueblos, ésta no tiene
ninguna carga religiosa, aquí no se presenta ninguna injerencia de la iglesia
sobre el pueblo, a pesar de que se celebra el mismo día del santo patrono de
Zacán, San Pedro.
Esta fiesta o concurso nació de la preocupación de un grupo de jóvenes
que hace casi 30 años decidieron ponerle un alto a la transculturización a la
que había estado sometida toda el área, ya que desde tiempo atrás la
inmigración hacia los EUA en busca de trabajo trajo como consecuencia el
abandono de las tradiciones; además, Zacán había tenido una fuerte emigración
hacia Paracho y Uruapan en la década de los cuarenta debido a la erupción del
Paricutín. El principal motivo del concurso era rescatar y retribuir el amor
por su comunidad en todos esos emigrantes mediante el rescate de las
actividades en las que la comunidad fuera directamente el foro donde se dieran
a conocer las tradiciones artístico culturales.
El motivo por el que Zacán haya tomado esta iniciativa se debe en
parte a la alta población de profesionistas con que cuenta, siendo el pueblo de
la meseta purépecha que tiene la tasa más alta de profesores en cuanto a
densidad demográfica. Hasta hace unos años no contaba ni siquiera con educación
primaria, así que todo aquel que quisiera hacer sus estudios básicos tenía que
salir a los pueblos cercanos. En la organización y en los preparativos de la
fiesta trabajan varias instituciones, como la Universidad Michoacana de San
Nicolás de Hidalgo, apoyando con equipo de sonido e impresión de carteles; la
iglesia, que presta el curato para que se hospeden las delegaciones, y la
Asociación de Profesionistas de Zacán, A.C., todas ellas hicieron realidad un
proyecto que ha llegado a constituirse como la fiesta purépecha más importante
hoy en día.
SI USTED VA A ZACÁN
Saliendo de la ciudad de Uruapan hacia Paracho, tome la carretera
federal núm. 37 y unos 16 km antes de llegar a Capácuaro desvíese en dirección
oeste. Desde este cruce y luego de pasar Angahuan a 8 km se encuentra el pueblo
de Zacán.
Asi es, Compañera.
ResponderEliminarUn gran evento digno de presumir y de admirar.
Este año no tuve la oportunidad de asistir, pero el año pasado tuve la fortuna de admirar este gran evento, por primera vez, y la verdad es algo que todos debemos darnos ese gusto porque desde que inicia hasta que termina no hay momento de aburrimiento o de desesperacion, todos lo disfrutamos en su maxima expresion.
Invitados el año que viene.